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 La industria colombiana cerró el primer semestre del año con una desaceleración notoria en su nivel de producción y ventas. Según la más reciente Encuesta de Opinión Industrial Conjunta (Eoic) de la Andi, entre enero y junio, la producción del sector manufacturero aumentó apenas un 1,3 por ciento frente a un 6,4 por ciento de igual periodo del 2011.

Por su parte, las ventas totales aumentaron entre enero y junio de este año un 3,2 por ciento, cuando en el mismo lapso del 2011, el alza había sido de otro 6,4 por ciento.

Dentro de las ventas totales, las realizadas en el mercado interno crecieron en la primera mitad de este año 1,9 por ciento frente al 6,3 por ciento del mismo semestre del 2011.

La cifra de producción industrial de junio fue inferior a la de mayo pasado, cuando ese indicador fue de 2,2 por ciento en lo corrido del año (cinco meses).

Esto indica que en junio se acentuó la desaceleración industrial del país.

La Andi reconoció que el sector enfrenta un panorama complicado, que se reflejó en los resultados de junio.

“No se puede desconocer que en la coyuntura reciente, la industria ha enfrentado una situación compleja”, señala la Andi.

Los principales obstáculos que perciben los empresarios en el desarrollo normal de su actividad son el tipo de cambio, los costos y suministro de materias primas, la baja demanda, la competencia en el mercado, el contrabando, los bajos márgenes de rentabilidad, las dificultades de logística y costos de transporte terrestre, la baja rotación de la cartera, la falta de capital de trabajo y los factores climáticos.

Los subsectores que reportaron las mayores caídas en su producción fueron vehículos automotores y sus motores (16,6 por ciento), hilatura, tejedura y acabados (12,8 por ciento), productos de caucho (12,8 por ciento), autopartes para vehículos automotores (11,3 por ciento) y refinación de petróleo (8,3 por ciento).

Por su parte, los que registraron los mayores crecimientos fueron aparatos de uso doméstico (30,8 por ciento), hierro y acero fundición de metales (30,6 por ciento) y productos minerales no metálicos (6,7 por ciento).