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Cerca de 15 mil caficultores de diferentes partes del país se congregaron este lunes en Manizales para solicitarle al Gobierno Nacional que les compre la próxima cosecha cafetera por un billón de pesos. Esos recursos llegarían al cultivador a través de un mayor precio de sustentación: un millón de pesos la carga de café (125 kilos), 400 mil pesos más del valor actual de la carga (600 mil pesos).

Desde tempranas horas de la mañana y en medio de la lluvia y el frío, los caficultores comenzaron a reunirse en frente de la plaza de toros con el objetivo de movilizarse por las principales calles de la capital de Caldas. Llegaron en chivas y en buses desde sitios tan distantes de Manizales como la Sierra Nevada de Santa Marta, como lo hizo el indígena arhuaco, Hermes Izquierdo, o desde el resguardo guambiano de Cajibio, en el Cauca, en el caso de Diana Jembuel. Los dos coincidieron en que el café les está dejando solamente pérdidas.

Desde las movilizaciones de comienzos de los 90s, cuando emergió Unidad Cafetera Nacional, no se veía en Manizales una movilización cafetera tan multitudinaria como la de ayer. Ríos de gente cubrieron las carreras 23 y 22, desde la plaza de toros, hasta la Plaza de Bolívar, que fue colmada por los manifestantes.

"La situación tiene que estar muy mal como para que venga tanta gente y desde tan lejos. Todos vinimos por nuestros propios medios, nadie nos pagó; queremos que nos escuchen porque estamos muy mal", afirmó Gustavo Buitrado Bedoya, quien arribó a la capital caldense con un puñado de caficultores de Belalcázar (Caldas).

A Manizales vinieron caficultores del Eje Cafetero, Antioquia, Valle del Cauca, Santander, Cundinamarca, Nariño, Huila, Tolima y Cesar.

La movilización fue organizada por el Movimiento por la Dignidad Cafetera, que le pide al Gobierno más recursos para la caficultura. "En el país se está hablando de un boom minero-energético, Ecopetrol le trasladó al Gobierno 15 billones de pesos y la caficultura necesita plata", explicó Aurelio Suárez, uno de los promotores de la movilización.

Jesús Velasco, gobernador del resguardo indígena de Cajibio, afirmó que la situación cafetera está provocando desempleo y desplazamiento. "El café era antes lo más importante para el Gobierno. Ahora es la minería y el café está un esquina", manifestó el líder indígena.

El senador del Polo Democrático Alternativo, Jorge Enrique Robledo Castillo, aclaró que la movilización no es un movimiento político-partidista, sino uno eminentemente cafetero que propende por la defensa de los derechos e intereses de los caficultores. Robledo precisó que "el Gobierno debe respaldar a los cafeteros atacando la revaluación (de cada 100 pesos -explica- del precio internacional del café, 30 se los lleva la revaluación), no cobrándole más impuestos (aumentando la contribución cafetera) y fijando un precio de sustentación remunerativo y estable".

Herminsul Starling, caficultor del municipio de Oporapa, en el Huila, dijo que esperan más atención del Gobierno. "No somos ineptos, ni mendigos, ni politiqueros, como lo dijo hace unas semanas el Gerente de la Federación Nacional de Cafeteros (Luis Genaro Muñoz). Le pedimos al Gobierno que ayude al gremio cafetero como este ha ayudado a los colombianos durante más de 85 años", afirmó el caficultor.

En un Foro Nacional Cafetero que se realizará en Ibagué, el 14 de septiembre, los cafeteros esperan entregarle una carta y un pliego de peticiones al Presidente Juan Manuel Santos. 

Fernando Umaña Mejía
Corresponsal de EL TIEMPO
Manizales