Página 1 de 1

Dos menores, en orillas opuestas de un atentado

NotaPublicado: Jue, 25 Oct 2012, 15:57
por iritaa

Las vidas de dos menores se cruzaron trágicamente en el ataque ocurrido este miércoles contra el supermercado Rapimercar, de Santa Marta, el cual dejó tres muertos y 45 personas heridas, según el reporte de la Secretaría de Salud Distrital.

Desde que abrió sus puertas en la mañana el supermercado, ubicado en el sector del mercado público, comenzó a llenarse de compradores porque había promoción de carnes rojas. (Lea: Autoridades atribuyen la granada en Santa Marta a los Urabeños).

A las 8:40 de la mañana, un joven de 17 años llegó hasta la puerta principal y, sin importar que el lugar estuviera lleno, lanzó una granada, que estalló en la cafetería del supermercado.

"Yo estaba haciendo compras y me salí para pagar porque me faltaba un producto. Cuando voy a buscarlo, sentí el estallido fuerte y vi que todo el mundo corría y gritaba bomba", narró Claudia Linero, quien se salvó de milagro.

"La explosión fue tan fuerte que se cayó una parte del techo", narró otra mujer embarazada que salió herida.

En medio de los destrozos quedó el cuerpo de Próspero Ayala Poveda, de 60 años, quien hacía compras, mientras que los heridos eran auxiliados por las ambulancias y organismos de socorro.

Entre los lesionados estaba una niña de seis años, quien se estaba comiendo en la cafetería con su mamá y un tío.

La menor, que había llegado el día anterior desde Cartagena con su mamá para reclamar los restos de su abuelo materno, murió cuando era atendida en la Clínica La Milagrosa. La otra víctima mortal fue Miriam Pinilla, de 34 años, quien falleció cuando era sometida a una cirugía en la Clínica Mar Caribe.

Mientras se llevaban a los heridos, en los alrededores de la plaza de mercado, el joven que lanzó la granada, que también resultó herido, fue identificado por unas personas. Los enfurecidos habitantes lo golpearon hasta que llegó la Policía, que evitó que lo lincharan y se lo llevó a un centro asistencial. No era la primera vez que lo detenían. La policía informó que hace mes y medio fue capturado por portar una pistola nueve milímetros.

"Lamentablemente, por la condición de menor de edad, fue dejado en libertad", dijo el comandante de la Policía Metropolitana de Santa Marta, coronel Fredy Tibaduiza.

El atentado fue atribuido por las autoridades a la banda criminal los Urabeños, y el móvil inicial sería el cobro de vacunas, aunque el coronel Tibaduiza dijo que los dueños de Rapimercar no habían denunciado haber sido objeto de extorsiones o amenazas.

El alcalde de Santa Marta, Carlos Caicedo, afirmó, tras un consejo de seguridad, que era reprochable y doloroso que un menor haya cometido este acto terrorista y ofreció una recompensa de 100 millones de pesos a quien entregue información que permita la captura de integrantes de los Urabeños y de personas que tengan en su poder granadas.

"Vamos a continuar incrementando la persecución de estas estructuras criminales, que apelan a los actos terroristas para intimidar e imponer sus estrategias extorsivas. En otras épocas apelaban a las llamadas o visitas a establecimientos", dijo Caicedo, quien convocó a los samarios a marchar mañana desde el parque Sesquicentenario.


Gremios repudian atentado


Los gremios de Santa Marta les solicitaron a las autoridades que refuercen la seguridad no solo en el mercado público sino en toda la ciudad. "Invitamos a la ciudadanía samaria a unirse y rodear a las autoridades en su estrategia para enfrentar y combatir a los violentos, que vienen atentando contra la población civil", dijo el presidente de la Cámara de Comercio de Santa Marta, César Riascos, a través de un comunicado. Los dueños de Rapimercar informaron que hoy abrirán las puertas, tal como lo han hecho en los últimos 18 años.


Paola Benjumea Brito
Corresponsal de EL TIEMPO
Santa Marta.



Fuente