Gina Caldas tiene su proyecto de vida armado: es bióloga celular y bioquímica, está terminando su Phd, lleva cuatro años en Colorado State University, está a punto de publicar su primer paper y está casada.
Pero esta semana fue invitada a Boston para recibir una oferta que puede cambiar sus planes: el Estado le ofreció a ella, y a un nutrido grupo de jóvenes científicos colombianos, la posibilidad de regresar la país.
El plan incluye un salario de 6 millones por dos años, un grant de 150 millones (subsidio para iniciar una investigación) 65 millones para gastos de menaje, 10 millones para la instalación, vinculación a una universidad, seguro de vida y hasta ayuda para que se cónyuge consiga trabajo.
¿Atractivo?, sí. ¿Tentador?, tal vez. ¿Lo tomará o lo dejará?, Aún no lo sabremos, porque, simplemente, no es una decisión fácil para un investigador que, como Gina, ha conseguido a pulso un lugar en los laboratorios de Estados Unidos.
Son 72 cupos los que ofreció Colciencias para que igual número de cerebros fugados regresen al país a hacer ciencia en 15 universidades. Una repatriación que, según la directora de esa institución, Paula Marcela Arias, busca mover la locomotora de la Innovación.
Un avance
Mauricio Fajardo es otro de los investigadores colombianos que esta semana recibió la propuesta y en una primera respuesta a este diario aseguró que "es un avance para aprovechar el talento en el exterior".
Un comentario amable y respetuoso, pero que no deja entrever las dudas que tienen los científicos colombianos para regresar al país. "Me preocupa la infraestructura", añade Gina, quien no está segura de que el país existan los mismos equipos de laboratorio para hacer sus trabajos.
De hecho, los comentarios informales de quienes escucharon la oferta de Colciencias en un animado taller de trabajo en el hotel Double Tree Hilton de Boston, apuntaban en esta dirección: a estos jóvenes talentos no los mueve el salario, sino buena infraestructura (laboratorio) y un buen mentor.
Un sondeo realizado por el grupo Diáspora de Científicos Investigadores Colombianos en Facebook lo corrobora: la mayoría señaló la poca infraestructura y la baja financiación como las principales razones para no regresar a Colombia.
Públicamente, en las deliberaciones en el taller, los científicos expresaron un par de razones adicionales: el temor de que no sea una política de Estado de largo aliento y la posibilidad de que puedan perder contacto con sus pares internacionales y quedarse solos en el país.
Otros aseguran que el plan está destinado más para los que apenas terminan su primer doctorado, pero no para aquellos que llevan más de 15 años fuera del país, con varios estudios e investigaciones y un núcleo familiar consolidado.
Privilegiados
Convencer a Gina, Mauricio, Morgan Echeverry o Nicolás Mora no será, entonces, fácil. Pero el Estado colombiano no ahorra esfuerzos en lograr persuadirlos, con una batería de argumentos que enfrenta estas dudas.
La Directora de Colciencias asegura que el próximo año peleará más presupuesto para investigación con una reforma a la ley de regalías que permita centralizar esos recursos provenientes de la explotación de recursos naturales. La iniciativa empezaría a discutirse en marzo.
La expectativa de una reelección del Gobierno, liderado por Juan Manuel Santos, también da una idea de que el programa podría tener soporte en los próximos cuatro años, pero esto depende de lo que ocurra en mayo en las urnas.
Marianny Combariza, de la Universidad Industrial de Santander, se sumó a los argumentos al manifestar que los laboratorios en el país están mejorando y prueba de esto es la investigación sobre la fibra de fique con la que se logró descontaminar las aguas afectadas por químicos usados en la fabricación de jeans.
¿Suficiente? Es un centro de investigación consolidado, pero qué pasa con los otros. La Directora de Colciencias les recuerda a los investigadores de la diáspora que ellos también deben presionar a los legisladores del país para conseguir más recursos.
"Antes que criticar o destruir han pensado en que ustedes son un grupo de privilegiados. Están en Suiza, pero allá es África. ¿Alguno de ustedes ha escrito una carta a un congresista para pedir más recursos para la ciencia?", les dijo para significar que el país también requiere de s ayuda.
Una respuesta
No es la primera vez que Colombia trata de repatriar a sus científicos. Lo hizo en los años 90 y los resultados no fueron los mejores. Taiwan y Corea sí lo lograron y los resultados saltan a la vista. "Es un buen comienzo", anota María del Pilar Corena, quien lleva 26 años haciendo ciencia en Estados Unidos, al evaluar la protesta.
Pero la pregunta se mantiene: ¿convencerá el Estado colombiano a 72 de sus más de dos mil científicos para que regresen al país para hacer ciencia en la patria? No lo sabemos. Ahora, ellos tienen la palabra.
JOSÉ ANTONIO SÁNCHEZ
BOSTON
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