Demanda nicaragense por plataforma es casi un refrito: Arrie
El exprocurador Carlos Gustavo Arrieta es el agente de Colombia para atender las dos nuevas demandas que Nicaragua interpuso contra nuestro país en la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
Para él, hay ciertas disposiciones particulares del Pacto de Bogotá y de la manera como se presentó la denuncia colombiana que harían pensar que no se aplica esa regla de que, desde un año después de retirarse de ese acuerdo, el país puede ser objeto de nuevas demandas.
Tampoco descarta que mediante una conciliación se le puedan hacer ajustes al fallo, emitido por la Corte el año pasado, en el que le quitó derechos económicos al país en parte del mar Caribe.
¿Cuál es la tarea del nuevo equipo que va a defender al país?
Colombia enfrenta dos nuevas demandas de Nicaragua; la primera, por plataforma continental extendida y la segunda, por el supuesto incumplimiento del fallo del 19 de noviembre del año pasado, y ante esto se decidió buscar un equipo que cubriera todos los temas a los que se refieren esos procesos. Es un equipo de una respetabilidad y un reconocimiento muy grande a nivel internacional y que por consiguiente podrá representarnos adecuadamente.
¿Con qué criterio fueron escogidos?
En primer lugar, el profesor Pierre-Marie Dupuy es una de las autoridades más grandes a nivel mundial en derecho del mar, al igual que Sir Michael Wood, Tullio Treves y Rodman Bundy. Son muy conocidos y muy respetados en esos asuntos. Es una combinación óptima porque balancean todos los conocimientos, todas las necesidades y todas las experiencias que Colombia requiere. Además hay otros abogados que también son expertos en derecho del mar y grandes académicos y pensadores en materia de derecho internacional, y fundamentalmente en derecho ante la Corte.
¿Quiénes son?
El profesor Michael Reisman es posiblemente una de las figuras más venerables en materia de derecho internacional. Él nos apoya no solo en el derecho del mar sino en el análisis de la competencia, con aspectos procedimentales. Lo mismo ocurre con el profesor Eduardo Valencia, colombiano que por 13 años fue secretario de la Corte Internacional de Justicia. Y tenemos al doctor Matthias Herdegen, quien es un constitucionalista e internacionalista alemán muy reconocido y que nos permite combinar los temas constitucionales internos con los de derecho internacional. Esto nos da la garantía de que contamos con el mejor equipo que se ha construido.
¿Cómo se va a manejar el proceso de la plataforma continental extendida?
Esta demanda la ve Colombia casi que como un refrito de los temas que se plantearon en el primer proceso, y que le fue negada a Nicaragua por parte de la Corte Internacional. Negación, como dice la sentencia, porque no aportó los elementos de juicio suficientes para demostrar que existía una plataforma continental extendida. Creo que esa situación no ha cambiado.
¿Cuáles son los tiempos de esta demanda en la Corte?
Estos procesos son largos. En la reunión que tuvimos con el presidente en la Corte, allí se convino que Nicaragua tendría un año para presentar sus memorias, es decir, la demanda totalmente estructurada, y nosotros a partir de eso tendríamos un año para presentar la contramemoria. Ya de entrada, allí hay dos años, y tras estos vienen otras etapas del proceso que también son lentas como son la réplica y la dúplica, y luego las audiencias. Creo que este tema se estaría resolviendo en unos 4 o 5 años.
¿Y la del incumplimiento?
Esta es una demanda inusual porque la Corte no ha tenido antecedentes parecidos que sean comparables. Creemos que ante las argumentaciones que ellos presentan tenemos argumentaciones muy claras y muy contundentes.
¿Pero en la pasada demanda que nos ganó Nicaragua también creíamos que teníamos argumentos muy contundentes?
Al igual que en el caso pasado, nadie puede garantizar un resultado en uno u otro sentido, pero, también al igual que en el otro caso, creo que Colombia tiene mejores argumentos para defenderse que los que tiene Nicaragua para atacar.
¿Este proceso de incumplimiento cuánto se podría tardar?
Es difícil saber cuánto se va a demorar por su naturaleza tan especial. La primera reunión con el presidente de la Corte y el agente de Nicaragua se realizará a finales del mes de enero, y allí se definirá un cronograma que yo supongo será más corto que el fijado para la plataforma extendida.
El fallo del año pasado de la Corte nos afectó bastante, ¿qué tanto riesgo hay con estas nuevas demandas de Nicaragua?
Riesgo existe en la medida de qué locuras se pueden hacer; se pueden presentar demandas aquí y se pueden presentar demandas allá. Esto pone de presente que tiene que haber un espacio para buscar algún tipo de seguridad entre los países en estos asuntos.
¿Estas dos nuevas demandas podrían eventualmente modificar el pasado fallo?
Infortunadamente, los dos procesos que cursan ahora no van a tener un impacto frente a lo decidido el 19 de noviembre del año pasado, y eso significa que de aquí no se va a recuperar lo que en esa ocasión se perdió.
¿Se ha planteado la posibilidad de conciliar con Nicaragua?
Esa pregunta la puede responder mejor el Presidente. Pero no solamente es factible sino que es muy usual, pues un porcentaje muy importante de las sentencias de la Corte Internacional se han terminado aplicando de la manera como las partes acuerdan aplicarlas. Es decir, las partes, de acuerdo con las normas que rigen a la Corte, pueden hacer ajustes sobre la decisión y pueden convenir aplicar reglas que son distintas. En este caso no hay ninguna razón para que eso no se estudie, y creo que las premisas para hacerlo están dadas.
Hay quienes dicen que la denuncia del Pacto de Bogotá no nos obliga a ir de nuevo a la Corte, ¿qué opina de eso?
Hay un debate importante entre internacionalistas que sostienen que la denuncia de un tratado solamente produce efectos a partir del año en que se presenta, pero hay ciertas disposiciones particulares del Pacto de Bogotá, y de la manera como se presentó la denuncia colombiana, que harían pensar que no se aplica esa regla del año. Eso es parte de la controversia que se tiene que dar ante la Corte.
¿Es decir, Colombia sí está estudiando ese tema?
Claro. Colombia no está dejando caminos sin evaluar.
Fechas claves del litigio con Managua
1. Fallo de La Haya
El 19 de noviembre de 2012, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) reconoció la soberanía de Colombia en el archipiélago de San Andrés y le concedió a Nicaragua una porción de mar al este del paralelo 82 que afecta intereses económicos colombianos en parte del mar Caribe.
2. Retiro del Pacto de Bogotá
El presidente Santos anunció, el 28 de noviembre de 2012, que denunciaba el Pacto de Bogotá, el cual ponía a Colombia bajo la jurisdicción de la CIJ para efectos de los pleitos con otros países. Así busca dejar al país a salvo de futuras pretensiones de otros países sobre territorio nacional.
3. La sentencia ‘no es aplicable’
El 9 de septiembre de 2013, el presidente Santos presentó su Estrategia Integral frente al fallo de La Haya. Allí notificó que la sentencia de la Corte no es aplicable mientras no haya un tratado que fije límites con Nicaragua y respete los derechos de los colombianos.
4. Nueva demanda
Nicaragua le presentó, el 16 de noviembre, a la CIJ una nueva demanda contra Colombia en la que le pide que declare el “rumbo exacto” de la frontera marítima entre ambos países en el Caribe, “más allá” de los límites definidos en la sentencia del 19 noviembre de 2012.
5. Otra demanda más
El 26 de noviembre, Managua llevó a la CIJ una tercera demanda en la que acusa a Colombia de “amenazar con el uso de la fuerza”. A su vez le pide que declare que Colombia está en la obligación de cumplir la sentencia del 19 de noviembre del 2012.
REDACCION EL TIEMPO
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