Las autoridades ya investigan un sorpresivo cambio en el contrato de la polémica máquina tapahuecos, pues la garantía en la calidad del servicio ofrecido pasó de dos años a seis meses. A la advertencia de la Contraloría Distrital al respecto se sumó este martes la Veeduría.
La entidad –que cuestionó fuertemente que esa contratación se haya hecho de manera directa– anunció que indaga ahora por qué razón y con qué criterios técnicos la Unidad de Mantenimiento Vial firmó dicha modificación, el pasado 17 de febrero.
La póliza es una prenda de garantía para que el Distrito pueda reclamar en dado caso de que los trabajos de la máquina tapahuecos presenten fallas. La Contraloría ya había señalado que “el amparo debe cobijar un tiempo prudencial de dos años para el mantenimiento de las vías. Lo anterior, con mayor razón cuando la misma Administración no se dio a la tarea de determinar las características de los materiales que debe utilizar el contratista en la obra de parcheo”.
El contrato de la Unidad de Mantenimiento Vial y la firma Green Patcher Colombia SAS, representada por el actor Juan Pablo Posada, se firmó el pasado 27 de diciembre, por 11.822 millones de pesos.
Aunque se hizo de manera directa, con el argumento de que era de ciencia y tecnología, la Veeduría manifestó que esa justificación no era válida, pues se trataba de una contratación de obra pública.
En respuesta a este diario, Ernesto Matallana, asesor jurídico del Distrito en este contrato, sostuvo: “La única compañía de seguros que estuvo dispuesta a amparar el contrato solicitó dos cambios fundamentales: que se eliminara el anticipo y que se modificara la garantía de calidad de materiales por una garantía de servicio y por el termino de seis meses, como es usual para este tipo de póliza”.
REDACCIÓN BOGOTÁ
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