El roquero argy Charly García, de 62 años, hizo todo lo que pudo para darles a sus seguidores en Bogotá un concierto inolvidable. Sin embargo, su salud le jugó una mala pasada y este sábado, a eso de las 8 p.m., el cantante y músico llegó al aeropuerto El Dorado para tomar un vuelo que lo llevó de vuelta a su país. (Lea también: Cancelado el concierto de Charly García en Bogotá)
Con esto, la ilusión de ver en escena el nuevo espectáculo ‘Líneas paralelas’ de García quedó aplazado y solamente entre martes y miércoles se le informará al público si habrá una nueva fecha en el futuro.
García llegó a Bogotá el pasado miércoles por la tarde. Según su itinerario, iba a hacer prueba de sonido el jueves hacia las 10 p.m., después de que el montaje técnico estuviera listo en el Coliseo El Campín de Bogotá.
Según información de Martha Ordóñez, jefe de prensa del concierto en el que García iba a compartir escenario con su compatriota Fito Páez, el artista pidió que fueran invitados algunos medios para dar algunas declaraciones antes de esta prueba de sonido, pero, aunque hubo cámaras de tres canales, García al fin no pudo hablar con ellos.
El motivo fue una demora en el montaje por problemas técnicos, que corrió la prueba de sonido hacia la medianoche. "García estaba listo en el hotel desde las 10 de la noche, diciendo que quería hacer la prueba -informó Ordóñez-. Y la hizo a la medianoche pero ya no alcanzó a hablar con los medios que sí alcanzaron a tomar imágenes del ensayo. Era un espectáculo show muy bonito, tenía cinco pianos, luces especiales que llevaban un concepto acorde con el nombre del ‘show’. Ensayó todas las canciones, una por una. La prueba de sonido terminó a las 3 de la mañana y se fue a descansar".
El icono del rock argy, famoso desde que hacía parte del grupo Sui Géneris, descansó todo el viernes. Su presentación estaba prevista para comenzar en cuanto Fito Páez se bajara del escenario y se montaran los instrumentos.
Alcanzó a salir para el concierto, pero en el camino al Coliseo se le hizo un chequeo médico de rutina. "Él se hace un chequeo de rutina siempre -explicó la vocera del concierto-. Viaja con un médico y además había pedido otro. Algo salió mal en el chequeo cuando revisaron el corazón e, inicialmente, dijeron que se desviarían un momento hacia la clínica para que lo chequearan, así tuvieran que retrasar la presentación una hora. Cuando llegaron allá vieron que había una situación crítica. Por eso al comienzo se creyó que era un posible infarto".
Entre tanto, en el concierto, Fito Páez alcanzó a hacer su espectáculo y a anunciar que en seguida, el público podría ver a García. Solo entonces se enteró de lo ocurrido. "Fito Páez fue el primero en llegar a la clínica", contó Ordóñez.
En la clínica se determinó que no hubo infarto sino un "pico alto de presión". Por lo mismo, explican, se consideró la posibilidad de que García pudiera cantar al día siguiente.
Sin embargo, en la tarde del sábado la recomendación médica fue otra. El comunicado final de la Fundación Santa Fe indicó que el artista se recuperaba satisfactoriamente, que se había descartado "un evento coronario agudo" y que se le recomendaba guardar 48 horas de reposo absoluto y remitirse a sus médicos de cabecera.
Con este parte de tranquilidad, y con el visto bueno médico, García salió de la clínica a eso de las 3 p.m. del sábado para alistar su regreso esa misma noche.
Para tranquilidad de los seguidores del artista, vía Twitter el productor de su concierto, José Palazzo, escribió: "Charly está en su casa".
REDACCIÓN CULTURA Y ENTRETENIMIENTO
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