Comedia, thriller, romance, drama y ciencia ficción. La versatilidad del mexicano Alfonso Cuarón como director está probada en su filmografía, una gama amplia de géneros para un director que apenas lleva dos décadas en el cine de Hollywood. (Vea acá toda la información relacionada a los Premios Óscar 2014)
Y fue la ciencia ficción el género que lo puso en la estratosfera, pues Gravedad, su más reciente película, un drama que ocurre en el espacio exterior, acaba de colocarlo como el primer realizador latinoamericano en ganar un premio Óscar.
¿Cómo un realizador manito acabó siendo uno de los consentidos de la industria cinematográfica más importante del mundo?
“No sé si soñaba con Hollywood y con el éxito, pero nunca quitó el dedo del renglón y su creatividad la dedicó por completo a eso”, escribió Mariana Elizondo, exesposa del director, en un artículo publicado en el diario mexicano Reforma.
Su primera oportunidad la tuvo en la pantalla chica al lado del veterano director Sydney Pollack, entonces productor de la serie Fallen Angels. Era 1993 y Alfonso había tronado la taquilla de su natal México con el filme de equívocos ‘Solo con tu parej’a. Bastaron estos dos episodios para que su nombre empezara a rodar entre los grandes estudios de Hollywood.
No importó que el cineasta nunca se hubiera graduado del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos de la Unam, pues, en medio de una polémica que aún no se ha resuelto, abandonó la carrera cuando el cortometraje ‘Vengeance is mine’, en el que participaba, no recibió apoyo para ser comercializado.
Tildado de obstinado, rebelde y ávido de ver y hacer cine, Cuarón se trasladó a Los Ángeles a probar suerte. Pasaron dos años hasta que Warner Bros. le ofreció la dirección de una cinta. Sin embargo, el mexicano se decantó por una adaptación de la literatura, acerca de una dulce y misteriosa niñita abandonada, que le dio un enorme presupuesto para lograr un filme de poca aceptación.
Su ópera prima, ‘La princesita’ (‘A Little Princess’), tenía un claro sabor a fiasco, pero las nominaciones al Óscar que consiguió (en fotografía y dirección de arte) demostraron lo contrario.
En 1998, 20th Century Fox le confió una nueva adaptación: ‘Great Expectations’, el cuento clásico de Dickens, con un elenco de peso encabezado por Gwyneth Paltrow, Ethan Hawke y Robert de Niro. Lo que parecía un coctel para el éxito fue aún peor que su anterior revés. Llovieron críticas sobre el filme, así que Cuarón miró hacia atrás y volvió a México, sin ni siquiera pensar que una cinta en español le abriría otra vez las puertas de la meca del cine.
Detrás de Harry Potter
Alfonso se reencontró con su hermano, el también realizador y guionista Carlos Cuarón. Su idea era rodar una película de carretera, irreverente y de contenido sexual: así nació ‘Y tu mamá también’, con Maribel Verdú y los entonces novatos en la gran pantalla Diego Luna y Gael García Bernal.
El triángulo sexual entre los dos adolescentes y la mujer madura recién separada hizo que Alfonso volviera a figurar en Hollywood, no tanto en las salas, sino entre los nombres de los nominados por la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas para quedarse con un Óscar al mejor guion original (2003).
No ganó. Pero de los fracasos siempre queda algo y fue, precisamente, después de su fama con ‘Y tu mamá también’ y gracias a la criticada ‘La princesita’ (donde ratificó una de sus alianzas creativas más arraigadas, con el director de fotografía mexicano Emmanuel Lubezki) cuando se convirtió en el director de la tercera película del exitosísimo ‘Harry Potter’.
La autora de la saga literaria, J. K. Rowling, fue quien lo sugirió para estar detrás de las cámaras en ‘El prisionero de Azkabán’, una de las entregas más polémicas del mago –por el giro de la trama y su nivel de violencia–. Esta era, hasta el éxito de Gravedad, la película más taquillera de Cuarón (250 millones de dólares). Le seguiría ‘Niños del hombre’, un drama posapocalíptico sobre la extinción de la humanidad, que lo haría merecedor de dos postulaciones más al Óscar (por guion adaptado y edición).
Y es que ‘Gravedad’, tal como su historia, que se desarrolla por fuera de este mundo (cuando una ingeniera médica queda deambulando en el espacio luego de sufrir un accidente), ha alcanzado cifras desorbitantes: un recaudo de 710 millones de dólares.
Gravedad’ consolida a Cuarón como un gran director, que siempre sale bien librado, a pesar de lo arriesgado de sus temas y apuestas. Es un director que combina la experimentación con el lenguaje y la técnica cinematográfica, con un talento para llegarle al público masivo”, opina el crítico de cine Pedro Adrián Zuluaga.
Los planos largos, los silencios reiterativos y los movimientos de cámara lentos, marcas registradas en los filmes de Alfonso Cuarón, de 52 años, encontraron en Gravedad su mejor carta de presentación.
El director pasó los últimos cinco años trabajando en este proyecto, que obtuvo su recompensa máxima el domingo por la noche.
Su nombre retumbó en el teatro Dolby de Los Ángeles, en la voz de la bella Angelina Jolie: ganaba la estatuilla por dirección, superando a Steve McQueen (12 años de esclavitud), Martin Scorsese (El lobo de Wall Street), David O. Russell (Escándalo americano) y Alexander Payne (Nebraska).
Gravedad’ fue una de las razones por las cuales se transformó el color de mi cabello –explicó en su discurso de agradecimiento, al hacer alusión a sus canas–. Si por algo estoy aquí es gracias a ti mamá, esto es para ti. Te amo”, finalizó en un emocionado español.
El Óscar era la cereza del pastel de una racha ganadora de la cinta que protagonizan Sandra Bullock y George Clooney, y por la que Cuarón se llevó a casa el Bafta, el Globo de Oro, los premios de los sindicatos de directores y productores y el Critics’ Choice, entre otros.
Hoy, saboreando el triunfo merecido, uno de los hijos de la dinastía Cuarón Orozco (conformada por tres hombres y una mujer) se prepara para regresar a la televisión. En sus manos está Believe, serie de drama y fantasía de la cadena NBC.
“El personaje del momento se llama Alfonso Cuarón porque no es fácil que un latinoamericano le enseñe a Hollywood a usar el 3D”, comentó el crítico colombiano Mauricio Reina, al destacar la técnica impecable por la cual Gravedad se quedó con seis premios Óscar más: a la mejor fotografía (Emmanuel Lubezki), edición, efectos especiales, mezcla de sonido, edición de sonido y música original (compuesta por Steven Price).
Las estatuillas compensaron el tiempo de trabajo del equipo liderado por Alfonso, pues el desafío técnico era enorme: rodar simulando que todo flotaba, sin gravedad, todo el tiempo.
“Hemos pensado en mostrar la mecánica de cómo la filmamos, y seguramente lo haremos en el DVD, pero es muy abstracto entender lo que hicimos”, les contó a los medios en México.
La cinta se materializó a partir de un guion que escribió con su hijo Jonás, con un presupuesto de más de 100 millones de dólares y con la asesoría de ingenieros, arquitectos y hasta científicos espaciales para lograr el mayor realismo posible.
Fanático del fútbol, amante de los paisajes del Pacífico de su país y orgulloso de hablar en inglés con un marcado acento latino, Cuarón vive en Londres desde hace casi una década, donde vive con Sheherazade Goldsmith, de raíces colombianas. Él se autodefine como un cineasta sin fronteras.
“Creo que los seres humanos primero nacieron y luego se les dieron pasaportes. Estoy realmente muy agradecido por este viaje y es un viaje que yo no diseñé”, señalo en la publicación japonesa Metrópolis.
Su paso por Hollywood
‘La princesita’ (1995)
Basada en el libro homónimo, es un viaje por la fantasía infantil.
‘Grandes esperanzas’ (1998)
Modernización del texto clásico de Charles Dickens, con Ethan Hawke y Gwyneth Paltrow.
‘Harry Potter y el prisionero de Azkabán’ (2004)
Es una de las entregas más polémicas de la saga del joven mago.
‘Niños del hombre’ (2006)
Clive Owen da vida a un activista que intenta salvar a la última mujer embarazada sobre la Tierra.
‘Gravedad’ (2013)
La actriz Sandra Bullock recibió una nominación por su personaje en el filme: una ingeniera médica que, por accidente, queda varada en el espacio, a miles de kilómetros de la Tierra, luego de emprender una misión con el astronauta Matt Kowalsky (George Clooney).
REDACCIÓN EL TIEMPO
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