El matemático tolimense Carlos Gustavo Palacino se ha dado el lujo de estar entre los ejecutivos mejor pagos del país. De hecho, su último sueldo por presidir el grupo Saludcoop era de 1.269 millones de pesos al año.
Además, andaba en carros de alta gama y tenía acciones en clubes y en al menos cinco grandes empresas.
Pero hoy dice que, si bien vive buena parte de su tiempo en Miami, el condominio que ocupa con su familia es arrendado. Además, la Contraloría General le tiene embargado sus bienes –en Cartagena, Cota, La Calera y Meta–, que serán rematados para recuperar parte de los 1,4 billones de pesos que el grupo Saludcoop habría desviado del Sistema Nacional de Salud. (Lea también: El rastro de Interbolsa en movimientos de Saludcoop).
Sin embargo, EL TIEMPO investigó las finanzas de Palacino y estableció que no todo su patrimonio ha sido rastreado y que varias empresas en las que aparece, no han sido tocadas, a pesar de que registran en libros activos por más de 40.000 millones de pesos.
Además, detectó que lo embargado por la Contraloría –incluidas las propiedades de 19 personas naturales y jurídicas– no cubre siquiera un 3 por ciento del supuesto faltante.
Los bienes congelados a Palacino y a su grupo valen tan solo 37.000 millones de pesos (1.247 millones de él). Y aunque el empresario advierte que ese es el avalúo catastral y no el precio en el mercado, es una mínima parte del dinero embolatado.
De ahí la insistencia de la Contraloría de que, antes de mayo, el Gobierno decida si liquida la EPS y, por esa vía, se recupere el dinero público que terminó invertido en clínicas y edificios del conglomerado económico.
El apartamento en Cartagena que Palacino tiene con su esposa, María Cristina Puerto, es uno de los embargados. Según el expediente, vale 300 millones de pesos.
Los bienes que faltan
También se embargó su casa en el condominio la Pradera del Potosí, en La Calera, tasada en 346 millones. Pero este diario estableció que los 2.500 metros cuadrados de terreno –500 construidos y con vista al campo de golf– fueron negociados por Palacino en 633 millones de pesos y pueden valer mucho más.
A esa lista se le suman cuatro terrenos en Cota (Cundinamarca), que superan los 7.000 metros cuadrados. También aparece una mínima parte del condominio Villa Valeria, en Restrepo (Meta).
Aunque Palacino fue el cerebro del proyecto –que requirió una inversión de 10 millones de dólares–, ahora solo le aparecen los lotes 1 y 27 cuyo costo es de 345 millones de pesos.
Los bienes a su nombre, que no están afectados por las investigaciones, incluyen constructoras y predios urbanos. Según bases de datos consultadas por reporteros de este diario, Palacino es dueño de las casas 44 y 49 del conjunto Costa Rica IV.
También aparecen con una participación en la Edificadora Restrepo S.A., –promotora de Villa Valeria–, que reporta activos por 29.249 millones de pesos, a fecha del 2012. De hecho, el viernes el ICBF le ganó una demanda a esa constructora, por hacerle el quite a los pagos parafiscales.
El expresidente de Saludcoop figura, además, en la Administradora Hotelera del Llano S.A., que según Cámara de Comercio, tiene activos por 10.000 millones de pesos. También aparece en Inversiones Palacino Ltda., hoy Le Jardin Inversiones Ltda., con 789 millones de pesos de capital. La firma funciona en un magnífico predio en Cota, de cerca de 2.500 hectáreas que incluye una casona y un restaurante.
Carrera contra el reloj
Palacino asegura que hace algunos meses vendió el establecimiento para cubrir una hipoteca de 2.400 millones de pesos. Pero, en papeles, Le Jardin Ltda. sigue apareciendo a su nombre. Además, EL TIEMPO visitó el lugar y encontró que la hermosa casona está llena de pertenencias de su familia. Incluso allí hay una gran venta de garaje que incluye la cama de la hija del expresiente de Saludcoop y cuadros de 2,5 millones de pesos.
Jurídicamente, estas firmas están activas y solo un par, entre ellas una fábrica de confecciones, salieron del mercado tras el escándalo.
Palacino admitió que no todos sus bienes están afectados y que los embargados siguen bajo su dominio. En todo caso advirtió que todos fueron adquiridos legalmente y que no hubo tal desvío de recursos de la salud. Por eso, alista acciones legales.
El Gobierno tiene un mes para definir si, como lo recomienda la contralora Sandra Morelli –que ya está de salida–, se liquida la gigantesca EPS del grupo, o se prolonga la intervención. También se espera que la Fiscalía defina si la conducta de Palacino y de su grupo fue legal o si deben pagar con cárcel.
La gran venta de garaje en el Le Jardin
Una cama en cedro marcada con el nombre de Valeria y ejemplares del CD Amor Voraz de Santiago –hijo de Carlos Palacino– hacen parte de la gran venta de garaje montada en una hermosa casona contigua al restaurante Le Jardin, en Cota. El remate comenzó hace pocos días, aseguran los trabajadores. “Ya se han vendido cafeteras y otras cositas. Están saliendo de eso porque no cabe en la casa del patrón en Bogotá”, le dijo a EL TIEMPO uno de los empleados, refiriéndose a Palacino. La venta está compuesta de una docena de cuadros, algunos de ellos valorados en 2,6 millones de pesos, delicada cristalería y hasta de una cama, matrimonial, que incluye el cómodo colchón.
Quien está a cargo de la venta es la cuñada de Palacino, Miryam Puerto. EL TIEMPO trató de contactarla para saber por qué siguen en el lugar, si ya lo vendieron, y si una retroexcavadora parqueada en las afueras hace parte del remate. Pero los teléfonos que aparecen en su tarjeta personal no fueron contestados.
‘Vamos a demandar’
Carlos Palacino empezó aclarando que los ingresos que recibió como presidente de Saludcoop –y que escandalizan a algunos– “son perfectamente legitimos”. “Deben tener en cuenta cómo se remunera a los ejecutivos de empresas de esta magnitud. El Grupo Saludcoop superó los 20 billones de pesos en los 17 años de operaciones”. Agregó que los bienes embargados los compró legalmente. Y que si bien no todo su patrimonio está congelado, algunos, como la Edificadora Restrepo, se han visto afectados por la investigación. (Lea también: Palacino dice que él no hizo negocios con Interbolsa).
Palacino también insistió en que no hay tal desvío de 1,4 billones de pesos. Por eso, su poll de abogados alista una demanda, ante lo contencioso, para tumbar el fallo de la Contraloría General. “La demanda va contra el fallo, pero no se descartan otras acciones jurídicas que ya se están estudiando”, anotó.
Para él, todas las inversiones hechas tienen relación con el objeto social del grupo, prestan servicios complementarios y son permitidas por la ley. “Además, las inversiones no excedieron el valor del patrimonio. Esto significa que fueron realizadas con recursos propios y con créditos bancarios, lo cual es permitido”.
Añadió que los balances de Saludcoop fueron aprobados todos los años por la Superintendencia de Salud. Además, que con esas inversiones, se adquirieron terrenos por 32.529 millones de pesos, hay construcciones en curso por 8.335 millones; edificios, por 164.800 millones; maquinaria y equipos, por 83.362 millones de pesos; equipos médicos, por 114.182 millones y de transporte, por 489 millones, explicó. “Los activos y las inversiones están en Saludcoop. Ninguno tiene que ver conmigo o con los directivos de la entidad”, puntualizó.
UNIDAD INVESTIGATIVA
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