Las familias colombianas podrán suscribir contratos de arrendamiento con opción de compra y aquellos que sean cabeza de hogar y hayan perdido su vivienda en un remate judicial o dación de pago podrán acceder a un subsidio del Estado.
Estos son de los efectos que tendrá la Ley del Suelo y Vivienda que el presidente Juan Manuel Santos presentó hoy en el municipio de Soacha (Cundinamarca).
"Gracias a esta ley se podrán suscribir contratos de arrendamiento con opción de compra, para garantizar el derecho de las familias -en especial aquellas sin capacidad de ahorro o acceso al crédito hipotecario- a adquirir una vivienda de interés social o de interés prioritario, nueva o usada", dijo Santos.
Estos contratos de arrendamiento se podrán complementar con los recursos del subsidio familiar de vivienda.
En cuanto a las familias que se vean afectadas por un remate judicial o una dación en pago, Santos sostuvo que "las personas que sean cabezas de hogar y hayan perdido sus casas podrán volver a acceder a un subsidio".
Para cumplir con este trámite, tendrán que postularse para el reconocimiento del subsidio familiar de vivienda por una sola vez, previa acreditación de la calamidad doméstica o la pérdida del empleo.
La nueva ley también establece controles para el precio de los suelos y una nueva participación en la plusvalía, en el que los propietarios y promotores de los proyectos paguen por las cargas urbanísticas.
"El modelo que vamos a aplicar consiste básicamente en que nosotros les damos el suelo y la norma, y ellos asumen el desarrollo de proyectos y la construcción de redes, espacio público y demás", dijo el Presidente. Este esquema se conoce como modelo de cargas y beneficios.
Con esta norma, el Gobierno le apunta a cumplir con su meta de construir un millón de viviendas nuevas para el 2014.
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