En la noche del pasado viernes se concretó la primera operación sobre una vivienda civil del Cauca usada por guerrilleros de las Farc para hacer ataques.
Un grupo especial de la Policía y del Ejército llegó hasta la vereda Pajarito, en Caloto, donde logró determinar que la vivienda de una anciana de 80 años era usada por miembros del frente sexto de las Farc para atacar a la Fuerza Pública y a las aeronaves que llegaban con apoyos a la zona.
Los investigadores sabían que el fin de semana alias Zeplin, el hombre de confianza del Sargento Pascuas, comandante del frente, estaría en una reunión en el lugar.
A media noche se dio el asalto aéreo, pero Zeplin alcanzó a huir con algunos de los integrantes de su guardia y dejó a otros seis guerrilleros enfrentando a los uniformados.
"Cuando entramos, la sorpresa fue ver que los hombres que lo cuidaban eran en realidad jovencitos. A los seis los capturamos y entre ellos había dos niños", le relató a ELTIEMPO.COM un investigador.
Además de la sorpresa por los pequeños guerrilleros que cuidaban al jefe de las Farc, los integrantes del grupo se percataron de que en la casa, además de la anciana, estaban dos niños de 3 y 5 años y la guerrilla organizaba su armamento delante de ellos sin problemas. En la casa encontraron una ametralladora punto 50 (utilizada para derribar aeronaves), 8 fusiles, munición y radios.
La Policía incautó memorias electrónicas y otro material. Se tienen videos y fotos de reuniones de guerrilleros del frente sexto, en los que se ven niños indígenas recibiendo instrucción o presenciando los entrenamientos.
Según fuentes oficiales, Pascuas ordenó a Zeplin presionar a las comunidades indígenas y obligarlas a rechazar la creación del batallón de Alta Montaña.
Una fuerza especial
Tras los ataques de las Farc contra varias poblaciones del Cauca, a comienzos de julio, se designó a las Fuerzas de Antiterrorismo Urbano para detectar e intervenir en las casas desde las cuales la guerrilla planea los ataques.
Esas fuerzas están integradas por tropas de tierra (las Fuerzas Especiales) y la Inteligencia de la Policía, que fue la encargada de hacerle el rastreo a la vivienda ocupada en Caloto.
Este grupo había actuado ya en La Julia (Meta) y Arauca, donde las milicias tenían azotada a Saravena y Tame. También fue el encargado de recuperar la gobernabilidad en las comunas de Medellín.
REDACCIN JUSTICIA
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